Un hombre surcoreano ha sido condenado por intentar evadir el servicio militar obligatorio al ganar peso de manera intencional mediante atracones de comida, según informaron medios locales.

El hombre, de 26 años, comenzó a comer en exceso antes de su examen físico final para el reclutamiento, según señaló un juez en Seúl. Al volverse obeso deliberadamente, fue reclasificado para un rol no combatiente en una agencia gubernamental, evitando así el servicio estándar en combate. Por sus acciones, recibió una sentencia suspendida de un año de prisión.

Un amigo que lo ayudó a elaborar un plan para duplicar su ingesta diaria de alimentos también fue condenado, recibiendo una sentencia suspendida de seis meses. Sin embargo, este amigo negó responsabilidad, argumentando que nunca pensó que el hombre llevaría a cabo el régimen extremo de alimentación.

En Corea del Sur, todos los hombres aptos mayores de 18 años están obligados a cumplir al menos 18 meses de servicio militar. Inicialmente, el hombre fue considerado apto para el servicio de combate durante su primera evaluación física. Sin embargo, para su examen final el año pasado, pesaba más de 102 kg (225 libras), clasificándolo como gravemente obeso e inadecuado para roles de combate activo.

Este caso resalta las medidas extremas que algunas personas pueden tomar para evitar las estrictas obligaciones de servicio militar en Corea del Sur.
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