Elon Musk se ha comprometido a regalar un millón de dólares al día a los votantes registrados en siete estados indecisos que firmen una petición de apoyo a la Primera y Segunda Enmiendas de la Constitución de Estados Unidos.
Su grupo de campaña, America PAC, creó la petición para apoyar la candidatura presidencial de Donald Trump en 2024, ofreciendo 100 dólares a los votantes de Pensilvania que firmen o recomienden a otros.
Además, se concede un premio diario de un millón de dólares al azar a un firmante de los estados disputados, entre ellos Pensilvania, Michigan, Georgia y Arizona.
Los dos primeros ganadores de los premios de un millón de dólares eran republicanos que ya habían votado a Donald Trump.
Un ganador, un hombre de Harrisburg, Pensilvania, y otra, una mujer que llevaba una camiseta de Trump en un acto en Pittsburgh, expresaron públicamente su apoyo a los esfuerzos de Musk.
Aunque la maniobra de Musk ha llamado la atención por su audacia, expertos jurídicos cuestionan su legitimidad.
Según la ley electoral estadounidense, es ilegal ofrecer dinero a cambio de registrarse o votar, y los infractores se enfrentan a posibles multas o penas de prisión.
El profesor Paul Schiff Berman, de la Universidad George Washington, sostiene que la oferta de Musk es probablemente ilegal, ya que se dirige a votantes registrados, lo que posiblemente viola estas leyes.
Sin embargo, Brad Smith, expresidente de la Comisión Electoral Federal (FEC), sugiere que Musk puede estar operando en una "zona gris" legal.
Como no paga directamente a la gente para que se registre o vote, sino para que firme una petición, es posible que el plan no infrinja directamente la ley.
Michael Kang, profesor de derecho electoral en la Universidad Northwestern, señala que la oferta parece diseñada para inducir el registro de votantes, lo que la hace legalmente problemática.
El gobernador de Pensilvania, el demócrata Josh Shapiro, ha pedido que se investigue la legalidad de los regalos en metálico, calificando la iniciativa de "profundamente preocupante".
Algunos, como el multimillonario Mark Cuban, han calificado la estrategia de Musk de “innovadora” pero potencialmente "desesperada".
Musk ha señalado que los demócratas han invertido de forma similar en esfuerzos de movilización de votantes, aunque los fondos se utilizaron para apoyar la divulgación electoral en lugar de pagar directamente a los votantes.
Al parecer, su equipo legal cree que están dentro de la ley, ya que Musk está ofreciendo dinero en efectivo a cambio de firmas de petición, no explícitamente para el registro de votantes.
La Comisión Electoral Federal y el Departamento de Justicia aún no se han pronunciado formalmente sobre este movimiento por parte de Elon Musk.