Paul Pogba ha afirmado que "no es un tramposo" a pesar de no haber superado un control antidopaje en agosto del año pasado, lo que le supuso una sanción de cuatro años. 

Pogba, cuya sanción se ha reducido a 18 meses, fue sancionado en febrero por el Tribunal Nacional Antidopaje de Italia (NADO) tras serle detectados niveles ilegales de testosterona. 
 “Este no soy yo, no soy un tramposo. Soy alguien que ama mi deporte, amo el juego y nunca, nunca haría trampas.  Soy un mal perdedor, pero no un tramposo. Asumo cierta responsabilidad porque tomé el suplemento. No lo comprobé tres veces; digámoslo así, aunque viniera de un profesional. Si me tienen que castigar, me parece bien, pero nunca deberían ser cuatro años", declaró Paul Pogba. 

 La suspensión del jugador de 31 años se redujo en septiembre después de que el Tribunal de Arbitraje Deportivo (TAS) considerara que su ingestión de la sustancia prohibida "no fue intencionada. 
Pogba, que fichó por la Juventus en 2022 como agente libre, podrá reanudar los entrenamientos en enero antes de poder disputar partidos en marzo.  

El francés sólo ha participado en 12 partidos desde su salida del Manchester United, y su temporada 2022-23 se vio muy afectada por las lesiones. 

Pogba tiene contrato en Turín hasta 2026 y ha señalado que volverá al fútbol "con más determinación y motivación para jugar hasta el final de mi carrera".