En medio de la creciente crisis económica, cada vez más personas optan por combinar el uso de bicicletas con el tren para ahorrar dinero. Los furgones de la línea Sarmiento se llenan de ciclistas que buscan reducir gastos mensuales, enfrentando largas jornadas laborales y trayectos diarios en bicicleta. Este fenómeno refleja una tendencia generalizada hacia alternativas más económicas para enfrentar el costo de vida.