"Lo que vaya a pasar no lo sabemos y cada diputado es dueño de su opinión cuando le toque votar", admitió el vocero presidencial, Manuel Adorni, durante la conferencia de prensa. El Gobierno tiene interlocutores con Macri, pero, hasta ahora, la respuesta no ha sido la esperada. "Lo va a volver loco a Milei y se lo va a hacer pagar caro", ironizaba un dirigente alejado del macrismo, pero que conoce al expresidente hace años. En Casa Rosada mantienen cautela, pero ya comenzaron a advertir que, de perder la votación en el recinto, podrían llegar a "judicializar" la ley.