La empresa matriz de Facebook, Meta, ha sido multada con 102 millones de dólares por la Comisión Irlandesa de Protección de Datos (DPC) por almacenar incorrectamente las contraseñas de los usuarios.
En abril de 2019 se inició una investigación después de que Meta informara a la DPC de que había almacenado accidentalmente las contraseñas de los usuarios en sistemas internos sin cifrar.
El comisionado adjunto del DPC, Graham Doyle, dijo que es "ampliamente aceptado" que las contraseñas no deben almacenarse en texto plano.
Se descubrió que Meta había infringido cuatro veces el Reglamento General de Protección de Datos (RGPD), lo que dio lugar a la amonestación y la multa.
Los comisarios del CPD, Des Hogan y Dale Sunderland, hicieron hincapié en lo delicado de la situación, que podía hacer vulnerables las cuentas de los usuarios.
Ya en mayo de 2023, Meta tuvo que hacer frente a una multa récord de 1.200 millones de euros por gestionar incorrectamente las transferencias de datos a Estados Unidos.
La empresa también fue multada con 265 millones de euros en 2022 por una filtración de datos que afectó a 533 millones de usuarios.