En menos de 100 metros, se cometieron dos robos en el barrio Pablo Podestá, generando alarma entre los residentes. A pesar de ser una zona monitoreada con anillos digitales, los delincuentes lograron sustraer un vehículo Uber y una moto. Los vecinos y comerciantes expresan su preocupación por esta ola de delitos en un barrio conocido por su comunidad trabajadora y segura.