Una reciente encuesta revela que el 28% de los argentinos enfrenta dificultades para llegar a fin de mes, recurriendo a préstamos familiares o tarjetas de crédito para cubrir necesidades básicas. Además, el 30% ha reducido sus gastos y solo el 6,6% puede ahorrar. La situación económica obliga a muchos a vender dólares para pagar cuentas e impuestos, afectando incluso a directores de multinacionales. Esta reducción en el consumo impacta negativamente la recaudación fiscal del país.