Expertos forenses exhumaron el miércoles los restos de la familia real enterrados en la catedral de Pedro y Pablo en San Petersburgo para determinar, con nuevas pruebas genéticas, si realmente pertenecen a Nicolas II, la emperatriz Alexandra Fiódorovna y las princesas Olga, Tatiana y Anastasia.
Tanto los descendientes de la casa Románov como la Iglesia Ortodoxa rusa siempre han dudado de la veracidad de la versión oficial.
Crédito: Euronews