Durante la inspección del establecimiento fueron identificadas 22 mujeres jóvenes trabajando como reclamo de clientela masculina sin estar dadas de alta en la Seguridad Social. Eran captadas por el personal de la discoteca y accedían a una bolsa de trabajo compuesta por 200 mujeres, gestionada a través de una aplicación de mensajería instantánea
La investigación se ha desarrollado sobre varios locales de ocio de la capital madrileña en colaboración con la Inspección Provincial de Trabajo y Seguridad Social