El Parlamento británico ovaciona a un diputado tras regresar después de sufrir un shock séptico. Se acostó con un aparente resfriado y a la mañana siguiente ingresó en el hospital con una sepsis, a las pocas horas de su ingreso su cuerpo “se puso azul”.
Craig Mackinlay, parlamentario conservador, ha vuelto a la política tras siete meses apartado. Pasó 16 días en coma inducido y después se tomó la decisión de amputarle las manos y los pies.