Las palabras de Javier Milei no se pueden “dejar de pasar por alto”. Es lo que opina la vicepresidenta tercera del Gobierno, Teresa Ribera, quien confía en que “antes o después pueda encarrillarse esta situación de la manera más inteligente posible, volviendo a la sensatez, al respeto a las normas y a los usos tradicionales de la diplomacia y el respeto entre instituciones”.