En cualquier democracia sería un escándalo.
Sin embargo, en España, los periodistas serviles con Pedro Sánchez arremeten contra la propia prensa vendiéndose al firmar un manifiesto en el que, además de respaldar al presidente del Gobierno, se lanza un duro ataque contra otros compañeros de profesión.
Por su parte, Pepa Millán, portavoz de Vox, ha criticado duramente a estos comunicadores atados de pies y manos al sanchismo.
“En lugar de denunciar los casos de corrupción que afectan al Gobierno, periodistas comprados con dinero público, cargan contra sus propios compañeros tachándoles de golpistas mediáticos, tachando a los jueces de golpistas judiciales y contra la separación de poderes en defensa de Sánchez”, manifiesta Millán.
“Hay que decirlo más veces, un periodista que firma un manifiesto en favor del Gobierno, deja de ser periodista para convertirse en activista, en un mariachi paniaguado del PSOE”, agrega la de Vox.
Además, “algunos de estos activistas cobran hoy más de medio millón de euros pagados con los impuestos de todos los españoles para llevar a cabo este tipo de campañas de propaganda”, ha señalado la portavoz del partido de Santiago Abascal, lo que representa “una anomalía democrática del que se cree que el Estado tiene que estar al servicio del PSOE y al servicio de Sánchez”.