Ya sabemos por qué Pedro Sánchez cogió cinco días de asueto.
El presidente del Gobierno necesitaba relajar la voz para, posteriormente someterse a un maratón de entrevistas en sus medios favoritos.
Si en la noche del 29 de abril de 2024 fue a TVE al masaje a cuatro manos propiciado por Marta Carazo y Xabier Fortes, este 30 de abril de 2024 le dio turno a Ángels Barceló (Cadena SER) para que mostrase sus habilidades a la hora de pelotear al presidente del Gobierno.
Y, por supuesto, la periodista de la emisora del Grupo PRISA no decepcionó a los más cafeteros.
Nada más empezar, permitió que Pedro Sánchez volviera a refritar la declaración institucional que se marcó frente a la puerta principal de La Moncloa y los ataques sin cuartel a los medios de comunicación que no le bailan el agua:
He estado mal estos cinco días, he estado pensando en abandonar una responsabilidad que tiene mucho honor, pero después de diez años esta campaña de difamación, esta política de la vergüenza, pero afortunadamente estos cinco días de reflexión, de estar con mi familia y ver la reacción social, he sacado dos conclusiones: que tenemos un problema muy serio en las sociedades contemporáneas y, el segundo, que asumo el reto de liderar y cuidar la democracia. He sido una víctima más de una estrategia bien diseñada, fríamente planificada, y de una maquinaria del fango muy engrasada.
El dirigente socialista se quejó amargamente ante una entregada Barceló de ser víctima poco menos que de una conspiración:
Tengo que hacer autocrítica que hacer. Desde 2014 yo he sigo objeto de esa mal llamada policía patriótica. He sido una víctima más, no la única, de una política muy afinada y una estrategia del fango muy preparado. Apoyado por pseudomedios digitales, platos de televisión donde se les da pábulo a los bulos, como PP y VOX que los utilizan y después organizaciones ultraderechistas, que las judicializan.
Àngels Barceló invitó al presidente del Gobierno a cortarle el grifo a aquellos medios que no se amoldan a los caprichos del sanchismo. Y, por supuesto, Pedro Sánchez asumió la medida.
En cuanto a la regulación de los bulos en los medios de comunicación, el presidente habló de ley de publicidad institucional:
¿Se cumple? No lo sé. Si hubiese aparecido con algún tipo de propuestas durante su comparecencia en La Moncloa habría sido frívolo. Yo no tengo todas las respuestas. He asumido el compromiso de liderarlo, pero no monopolizarlo. Estamos de acuerdo en que necesitamos garantizar una información veraz.
El presidente del Gobierno se mostró comprometido para luchar contra los bulos y la desinformación. Aseguró que los efectos de este problema se han vivido en Estados Unidos e incluso durante la campaña de las elecciones municipales, cuando se acusó al gobierno de comprar votos.