El crecimiento poblacional, así como el crecimiento económico, que promueve el consumismo de la población, generan grandes emisiones de carbono mundiales, por el inadecuado uso de recursos y de energía, lo que provoca su desabasto y un impacto ambiental que compromete la salud pública y seguridad alimentaria.
Aprende más de este tema con Gabriela Sánchez Olguín, investigadora de la Universidad Autónoma del Estado de Hidalgo.