La Catedral de Santa María y San Julián de Cuenca ha sacado a la luz unos "grafitis escondidos" en su cimborrio que coinciden con lo que podrían ser, según los expertos, la equivalencia de los planos arquitectónicos de la girola de la Catedral de Burgos, un hallazgo que si bien data de la obra de rehabilitación del claustro y la torre del cimborrio, que tuvo lugar en 2009, ha sido desvelado ahora.