Lizzo rompió su silencio el jueves después de que tres de sus ex bailarines presentaran una demanda contra ella, su compañía de producción, Big Grrrl Big Touring, Inc. (BGBT), y Shirlene Quigley, la capitana de su equipo de baile. La cantante de "Truth Hurts", cuyo nombre real es Melissa Jefferson, compartió un comunicado en Instagram, respondiendo a las acusaciones, calificándolas de "falsas" e "indignantes".