Ben Affleck y Jennifer Garner, los simpáticos ex, muestran su amistosa relación mientras se reencuentran en Santa Mónica durante su trayecto matutino al colegio. Después de dejar a su hijo Samuel, la ex pareja entabla una conversación cálida y amistosa, demostrando el epítome de la co-paternidad bien hecha. A pesar de su separación, Ben y Jennifer dan prioridad al bienestar de sus hijos, dando ejemplo de comunicación eficaz y respeto mutuo.