Michelle Calkins lleva 18 años viviendo en las montañas de San Bernardino (California) y nunca había visto nevar tanto. Tras permanecer una semana atrapada por la nieve, envió una petición desesperada a las redes sociales. Dice que hay personas atrapadas en sus casas y otras que no pueden recibir sus medicamentos. Una madre caminó por la nieve tras dar a luz a su bebé, llamado Winter. Para colmo de males, el tejado de uno de los pocos mercados que quedan abiertos en la ciudad se derrumbó.