El Departamento del Tesoro de EE.UU. adoptó lo que denominó "una de sus medidas sancionadoras más importantes hasta la fecha" para reprimir a quienes ayudan a Moscú en su guerra contra Ucrania, apuntando al sector metalúrgico y minero de Rusia, a sus instituciones financieras, a su cadena de suministro militar y a personas y empresas de todo el mundo que ayudan a Moscú a eludir las sanciones vigentes.