La Reina Isabel está repartiendo alegría navideña, pero está tomando más precauciones para evitar la propagación del Covid-19. La monarca británica ha cancelado su tradicional almuerzo prenavideño ante el aumento de los casos de coronavirus en el Reino Unido. "La decisión es preventiva, ya que se considera que si se lleva a cabo pondría en riesgo los preparativos navideños de muchas personas.