Los investigadores han encontrado armas y otras pruebas después de que unos hombres armados vestidos de camuflaje abrieran fuego contra los asistentes a un concierto cerca de Moscú este viernes 22 de marzo, matando al menos a 115 personas e hiriendo a centenares de ellas en un atentado reivindicado por militantes del grupo terrorista yihadista Daesh.