En su tercer día de actividades, el papa Francisco ofrece una misa ante 90 mil personas en el Centro Deportivo Municipal de San Cristóbal de las Casas.

Esta es la primera visita de un Papa al estado de Chiapas.

El templete donde oficia la misa fue creado como una réplica de la Catedral de San Cristóbal, las escalinatas de la pirámide de Palenque e imágenes de las cascadas de Agua Azul.

El Santo Padre no usó el tradicional incensario de bombillas plateadas al inicio de la misa, sino un sahumerio indígena de barro.

Tras bendecir el altar, comunidades indígenas participaron en la misa leyendo en sus propias lenguas.

Posteriormente, el Evangelio, tomado del capítulo 25 de San Mateo, fue leído en lengua Tseltal ante la atenta mirada del Papa y de toda la comunidad indígena que asiste a la misa.

Se espera que el Santo Padre celebre la eucaristía en español, y que partes de la ceremonia sean en tzotzil y tzetzal, dos de las lenguas indígenas que se hablan en Chiapas.

Alrededor de 300 diáconos están en la misa, quienes repartirán la comunión a los asistentes a la misa.