Corea del Norte ha terminado los preparativos para el lanzamiento de un misil de medio alcance desde su costa este, dijeron funcionarios de Seúl este martes, mientras que el Sur se prepara para otro sospechoso acto de provocación, en medio de las fuertes tensiones en la Península Coreana.

Las fuerzas de Corea del Sur han estado en alerta máxima para un inminente lanzamiento de un misil por parte de la nación comunista, la cual fue vista moviendo dos misiles Musudan a su costa este la semana pasada y montarlos en plataformas móviles.

Los funcionarios surcoreanos creen que hay muchas posibilidades de que Pyongyang pueda disparar un misil alrededor de 15 de abril para conmemorar el cumpleaños del difunto líder fundador del país, Kim Il-sung, quien es también abuelo del actual gobernante Kim Jong-un. El año pasado, el Norte, sin éxito, llevó a cabo el lanzamiento un día antes del 100 aniversario del natalicio de Kim.

"De acuerdo con el análisis de inteligencia de los movimientos de misiles de Corea del Norte, se cree que ésta ha completado los preparativos para el lanzamiento", dijo un oficial militar de alto rango, pidiendo anonimato citando información confidencial. "Técnicamente, puede disparar (un misil) desde mañana".

Funcionarios de inteligencia surcoreanos y estadounidenses han seguido de cerca las instalaciones de Corea del Norte donde se cree que se encuentran los misiles Musudan en los vehículos transportadores de lanzamiento. El misil puede volar de 3.000 a 4.000 kilómetros y es capaz de golpear la base de Estados Unidos en Guam, en el Océano Pacífico.

Aunque es difícil determinar la intención del régimen aislado detrás de la acción provocadora, funcionarios surcoreanos dicen que la medida es vista como destinada para consolidar el poder del régimen de Pyongyang y la búsqueda de un gran avance en el impasse con Seúl y Washington.

"Corea del Norte parece utilizar provocaciones militares, como el lanzamiento de misiles de rango medio, como un medio para construir la unidad nacional y presionar de Corea del Sur y EE.UU.", dijo el portavoz del Ministerio de Defensa, Kim Min-seok.

Para el seguimiento de la trayectoria del misil, dos destructores Aegis con radar SPY-1, que pueden rastrear cientos de objetivos de hasta 1.000 kilómetros de distancia, han estado en espera en las costas este y oeste de la Península Coreana.

Japón dijo el martes que ha desplegado misiles interceptores PAC-3 a los lugares clave de Tokio.