Gary Connery, un británico que trabaja como doble en películas de acción, hizo el primer salto en caída libre sin paracaídas desde un helicóptero a 730 metros de altitud en la localidad de Ridge Wood, en Buckinghamshire.

Para completar el salto, el hombre de 42 años usó un traje de alas creado por él mismo y para amortiguar la caída colocó 18 mil 600 cajas de cartón en el suelo.

Durante el descenso, que duró menos de un minuto, Connery alcanzó los 130 kilómetros por hora. Sin embargo, a partir de los tres segundos de caída, el traje empezó a reducir la velocidad y él empezó "a volar", según su propia descripción. "Fue increíble. Me siento totalmente eufórico", declaró a la cadena BBC.

Connery dijo haber pasado miedo, pero aseguró que estaba convencido de que iba a conseguir el reto. "Siempre supe que podía lograrlo" señaló.