Lo último es que Alberto González, que así se llama la pareja de Isabel Díaz Ayuso, se enriqueció también, y no poco, con la venta de mascarillas en lo peor de la pandemia. Sí, otro que mientras la gente moría y buscaba desesperadamente material sanitario, se iba enriqueciendo con comisiones millonarias. ¿Les suena?