Gran Peste de Londres y la peste bubónica:
La peste bubónica es una enfermedad grave causada por la bacteria Yersinia pestis, que se transmite principalmente a través de la picadura de pulgas infectadas. Los principales síntomas incluyen fiebre, dolor de cabeza, escalofríos, debilidad e inflamación de los ganglios linfáticos (bubones).
La Gran Peste de Londres fue una de las epidemias más devastadoras de la historia, que azotó la ciudad de Londres en 1665-1666. Esta epidemia de peste bubónica se propagó rápidamente debido a las malas condiciones de higiene y hacinamiento en la ciudad. Se estima que la peste bubónica mató a aproximadamente 100,000 personas en Londres, lo que representó alrededor del 20% de la población de la ciudad en ese momento.
La peste bubónica sigue siendo una enfermedad que se presenta en algunas partes del mundo, especialmente en África, Asia y Sudamérica. Aunque es rara, se considera una posible amenaza como arma biológica y los gobiernos mantienen planes de preparación y tratamiento en caso de brotes. Con un diagnóstico y tratamiento temprano con antibióticos, las tasas de supervivencia de la peste bubónica son altas.