El cáncer de vejiga es uno de los tumores con mayor tasa de incidencia en el mundo y el cuarto tumor más frecuente en hombres. Aunque su mortalidad no es elevada, es uno de los más difíciles de curar y casi la mitad de los tumores reaparecen al cabo de cinco años. Un nuevo estudio ha logrado reducir en un 90% los tumores de vejiga en ratones haciendo uso de nanorobots que transportan el fármaco hasta el tejido cancerígeno.Estas pequeñas máquinas se impulsan con agua de orina, llegan al tumor y son atacadas con un radioisótopo superficial. Este trabajo ha sido liderado por el Instituto Catalán de Bioingeniería, en España. En los tratamientos actuales, los fármacos se administran directamente en la vejiga, pero a pesar de las buenas tasas de supervivencia, la eficacia terapéutica es baja