Carlos Herrera celebró de manera moderada el palazo judicial que recibió Pedro Sánchez.
El hecho de que el Tribunal Supremo tumbase la intentona para dejar a Carles Puigdemont sin vinculación alguna con el terrorismo supuso una excelente noticia para el comunicador estrella de la Cadena COPE, pero maliciándose a la vez que alguna añagaza tendrá pensada el inquilino de La Moncloa:
La otra noticia del día era el revolcón que sufrió ayer el fiscal Álvaro Redondo, que con él se han llevado el mismo revolcón el Fiscal General del Estado y Sánchez también. Porque la Junta de Fiscales del Supremo, por 12 a 3, tumbó el informe exculpatorio que el fiscal Redondo había presentado sobre el caso tsunami.
El informe último tenía como objeto dejar de libre de polvo y paja a Puigdemont. Listo todo para la amnistía. Esto del caso tsunami, que es, los sucesos que ocurrieron en Barcelona en 2019. Desde el primer momento se consideraron los hechos como terrorismo y nadie lo discutió, nadie. Y la Fiscalía tenía claro que lo era.
El comunicador almeriense subrayó que lo del terrorismo no era cuestionable hasta que entró en escena Carles Puigdemont:
Y nadie discutía que era terrorismo hasta que Puigdemont fue investigado en la causa. Desde entonces todo el esfuerzo del Gobierno está en lograr la impunidad del socio. Negando que hubiera terrorismo. Lo dice el Código Penal, la jurisprudencia, más de 150 personas que están cumpliendo penas por terrorismo en las cárceles españolas sin tener delitos de sangre. Pero al Gobierno le da lo mismo. Porque está empeñado en encajar a martillazos los intereses políticos en el Estado de Derecho.
No obstante, el director de 'Herrera en COPE' echó agua al vino temiéndose una nueva jugarrera de Pedro Sánchez para librar a Carles Puigdemont del delito de terrorismo y de alta traición:
¿Y ahora qué pasa? Bueno, no se hagan muchas ilusiones. Después de la derrota de ayer, el fiscal general, a las órdenes del Gobierno, el inadecuado fiscal general, según el Poder Judicial, le va a encargar a su mano derecha, que es otra que tal, de la misma cuerda, un nuevo informe que va a ignorar la opinión mayoritaria de la carrera fiscal. ¿Para qué? Para proponer lo que le conviene a Pedro Sánchez. ¿De quién depende la Fiscalía? Bueno, pues eso. Ese informe tampoco será vinculante.
Y este es uno de los problemas gordos que tiene la impunidad que se pretende garantizar a Puigdemont. La amnistía no se puede aplicar a los delitos de terrorismo y por eso el Gobierno está empeñado en decir que no hay terrorismo, aunque lo sea a gritos. Y lo mismo pasa con los delitos de traición. No son amnistiables.