Hay días como hoy en que nos sentimos deprimidos y agobiados por la tristeza invernal, ya que los meses fríos y oscuros parecen no tener fin a la vista.
El trastorno afectivo estacional (TAE) afecta a millones de personas en todo el mundo, pero un cambio en la dieta puede ayudar.
La falta de sol en esta época del año puede provocar una carencia de vitamina D. Existe una relación entre el TAE y los niveles bajos de vitamina D.
Para combatir este problema, empieza a comer más alimentos ricos en vitamina D. Por ejemplo, consume más pescado azul o setas. También puedes tomar suplementos de vitamina D.
El magnesio es conocido como el nutriente del bienestar. Las personas que luchan contra la depresión suelen padecer una carencia de magnesio.
Entre los alimentos ricos en magnesio están los frutos secos como las almendras y los anacardos, el chocolate negro, el arroz integral, la mantequilla de cacahuete e incluso las semillas de calabaza y chía.
El triptófano es un aminoácido que se sintetiza en serotonina. El consumo de alimentos como el pollo magro y los huevos favorece la producción de la hormona de la felicidad.