Un jugador de la selección de fútbol de Panamá ha sido asesinado en la ciudad de Colón.
Unos hombres armados abrieron fuego contra un grupo de personas, entre las que se encontraba Gilberto Hernández, de 26 años.
Los dos asesinos obligaron a un taxista a llevarles a un edificio del Barrio Norte de la ciudad antes de abrir fuego.
Huyeron tras el masacre, pero uno de los sospechosos fue detenido en un piso cercano al lugar del crimen.
El jugador del Club Atlético Independiente murió y varias personas resultaron heridas en el tiroteo, cuyo motivo aún no se ha descubierto.
Este tiroteo es el último episodio de violencia en la ciudad donde las bandas siguen disputándose las rutas del narcotráfico.
Cincuenta personas han sido asesinadas en la ciudad este año, lo que ha llevado al padre de Gilberto a instar a los jóvenes de la ciudad a "detener la violencia".