Con el paso de los días, y el cerco estrechándose alrededor de Luis Rubiales, el de Motril continúa sin presentar su dimisión como presidente de la RFEF tras su beso no consentido a Jenni Hermoso durante la final del Mundial femenino de fútbol. Con el de Motril 'desaparecido', su familia ha decidido mover ficha en su nombre, y su madre Ángeles Béjar se ha atrincherado en una iglesia de la localidad granadina y ha iniciado una huelga de hambre que asegura que no interrumpirá hasta que la futbolista diga la verdad. Mientras Jenni guarda silencio sobre la desesperada medida de la madre de Rubiales para presionarla, han salido a la luz nuevas imágenes, presuntamente filtradas por el entorno de Rubiales, en los que la jugadora no parece afectada por el 'pico' del presidente de la RFEF, puesto que bromea entre risas con que son los nuevos Iker y Sara. Imágenes sobre las que el entorno de Jenni prefiere mantenerse al margen, como es el caso de su hermana Silvia.
(Fuente: Europa Press / RFEF)