Una nueva investigación ha revelado que escuchar música antes de ir a dormir puede afectar el sueño.
Los cientÃficos analizaron cómo las canciones pegadizas pueden influir de forma negativa en la calidad del sueño de las personas.
Este tipo de canciones son aquellas que se quedan repitiéndose en la mente.
Aquellas personas que escuchan estas canciones antes de acostarse tienen seis veces más probabilidades de experimentar un sueño de baja calidad.
Si escuchamos música, estamos aumentando el riesgo de que esta no desaparezca de nuestra mente mientras dormimos. Si esto ocurre, es probable que nos afecte al sueño , Michael Scullin, profesor de la Universidad de Baylor.
En el estudio, se usaron tres canciones muy pegadizas.
Las canciones fueros Shake it Off de Taylor Swift, Call me Maybe de Carly Rae Jepson y Don't Stop Believin de Journey.
Los investigadores sugieren que el cerebro sigue procesando la música incluso varias horas después de que haya dejado de sonar.