A finales de febrero de 1993, Mario Moreno mundialmente conocido como Cantinflas, quien ya se encontraba retirado de la pantalla, y otorgaba alguna entrevista de vez en cuando, fue diagnosticado con un cáncer de pulmón de etapa avanzada.
Luego del diagnóstico recibido, su calidad de vida como su estado general, empeoraron drásticamente y se volvió muy inestable.
Su hijo Mario Arturo Moreno Ivanova aseguraba que era frecuente verlo un día bien, caminando de manera normal y al día siguiente postrado en la cama, sin poder levantarse.
Debido a la apremiante situación, decidieron trasladarlo a Estados Unidos. Buscando una esperanza en los avances médicos y tecnológicos, para tratar su enfermedad.
Por pedido explícito del propio Cantinflas, nada de esto debía hacerse público.
Sin embargo, el tratamiento no tuvo el éxito esperado y como su condición pendía de un hilo, el actor solicitó regresar a México, para estar en su casa con su familia.
Mario Ivanova y su primo Eduardo Moreno Laparade, comenzaron a tener conflictos y peleas por los cuidados de Mario. Conflicto que luego tendría una compleja resolución a la hora de pelear por la herencia del millonario comediante.
Era 20 de abril de 1993, en Ciudad de México, y algo está a punto de cerrar los ojos del actor mejor conocido como Cantinflas...Para siempre!