Sonia Valenzuela Pons, jefa de azafatas de Dominicana de Aviación, reveló que trabajó arduamente con el coronel Rafael Fernández Domínguez y los militares constitucionalistas que trataron de evitar el golpe de Estado contra Juan Bosch en 1963, transportando mensajes, armas y otros objetos que se emplearían para enfrentar a los golpistas.

Nunca había revelado públicamente su participación en estos hechos, y en una ocasión fue descubierta transportando armas, y resultó apresada, pero la salvó Lorenzo Berry (Wimpy), quien asumió la responsabilidad diciendo que el objeto transportado era suyo, y en realidad se trataba de un agente americano que estaba al tanto de lo que ocurría.

Reveló que también administraba información de llamadas nacionales e internacionales en la CDA, y que finalmente conoció a Juan Bosch, quien estaba al tanto de su trabajo en defensa del gobierno que encabezaba.

Sonia Valenzuela colaboró en la revolución de abril de 1965, y estuvo en el edificio Zebra, en donde se planificaban acciones militares de los constitucionalistas, hasta convertirse en la persona de más confianza de Manuel Ramón Montes Arache, a quien considera el más grande estratega militar que tuvo la guerra civil. Hermanado con Caamaño, Montes Arache era previsor y se olía las dificultades y siempre calculaba las pérdidas de vidas en las acciones militares.

Dijo que los políticos han sido todos inconsecuentes y malagradecidos con un hombre como Montes Arache, que defendió la patria y no tiene ni siquiera un callejón que lleve su nombre, cuando gente sin relación con el país, como Churchill, Lincoln o Kennedy tienen grandes avenidas.
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