El consumo de sustancias psicotrópicas como actividad recreativa orilla a jóvenes al
mundo de las adicciones, en donde hoy luchan en centros especializados como el
Grupo de Drogadictos Anónimos ´La Promesa´, en el cual personas como Enrique,
Francisco y Fernando, buscan una nueva oportunidad de vida alejados de esta
condición.