Activistas recalcan que, al aprobar este cambio, por incapacidad de OOMSAPAS para proveer agua, nuevos proyectos inmobiliarios intentarán instalación de desaladoras, situación que pondría en riesgo ambiental al municipio de La Paz en Baja California Sur.
Los detalles, en la edición impresa del Semanario ZETA