Florencia (Italia), 8 feb (EFE).- (Imagen: Gonzalo Sánchez) Un enorme andamio une desde hoy el suelo y las alturas del histórico baptisterio de Florencia, como un laberinto vertical que permitirá restaurar los más de mil metros cuadrados de antiquísimos mosaicos de su cúpula por primera vez en un siglo, ante la severa mirada de un Cristo que juzga desde tiempos inmemoriales.
Edición y locución: Marta Abascal Centenera