José Monzo, líder sindical en Sada (A Coruña), estuvo dos años escapando de los falangistas viviendo oculto en diversos sitios. Los más peligrosos, dos islas rocosas y pequeñas en la Ría de Betanzos. Sin nada más que la comida que le traían cada cierto tiempo sus familiares en barca, acabó volviendo a tierra, "muy deteriorado física y psicológicamente", se despidió de su familia y se quitó la vida. Era julio de 1938.
Informa: Juan Oliver y Candela Barro
Vídeo e imagen: Candela B