El propietario es Ricardo Waidelich y protege el ejemplar añoso de Palo Rosa su chacra de Andresito, que tiene más de 6 metros de circunferencia y estiman más de 300 años de vida. La familia en forma voluntaria resguarda unas 61 hectáreas –de una propiedad de 150 hectáreas de superficie en total- uno de los ecosistemas más amenazados de América del Sur, el Bosque Atlántico o Selva Paranaense. Postulo al ejemplar para la decimoprimera edición del concurso Colosos de la Tierra, que promueve la ONG A Todo Pulmón de Paraguay.
DC