Hoy es uno de esos días que llegan cargados de noticias dramáticas, pero no me resisto a pasar por alto la penúltima pavada del ministro más inútil, inepto y sectario de Europa occidental: el comunista Alberto Garzón.
Este tipo, que hace unos días insultó al Rey Juan Carlos, llamándole ‘ladrón’ y al que ya han puesto una querella, acaba de aprobar cuatro nuevos alimentos, que recomienda encarecidamente a los españoles: grillos, saltamontes, larvas de escarabajo y polvo de gusano.
‘Ça va de soi’, como se dice en francés, que este Garzón, que insta al personal a comer insectos, es el mismo que hace ascos oficiales a las vacas españolas y a la carne roja, aunque en su boda sirvió solomillo de ternera y ataca el jamón ibérico como si no hubiera mañana, en cuanto tiene ocasión.
Previendo la que le íbamos a dar, se ha tratado de cubrir EL culo alegando que la inclusión de esos bichos, como sugerencia culinaria, se produce a instancias de la Comisión Europa y será verdad, pero ya les digo que de la Unión Europea llegan con regularidad gilipolleces antológicas.
Sin ir más lejos, no hace ni dos semanas en que, coincidiendo con el Día Internacional del Burro, esos eurodiputados que cobran 12.000 euros al mes y tienen unos hábitos laborales que convierten en trabajos forzados la propuesta de Podemos de instaurar la jornada semanal de cuatro días, invitaron al Europarlamento a un sujeto que se dedicó a rebuznar durante un minuto desde el estrado y al que pagaron al parecer 25.000 euros.
Dejándonos de tonterías para adentranos en el terreno de las indignidades, al que tan proclive son el Gobierno Sánchez, el PSOE y sus compinches, decirles que los socialistas se han unido en el Parlamento catalán a los golpistas de ERC y Junts, para suscribir una proposición de ley que erradica el español como ‘lengua de aprendizaje’ en las aulas.

Meses atrás Sánchez renunció a considerar el castellano lengua vehicular en Cataluña, y ahora, con tal de no dar cumplimiento a la sentencia del Tribunal Superior que exige garantizar un mínimo del 25 por ciento de enseñanza en español, se pliega sumiso otra vez ante los separatistas.

Van a permitir, por lo visto, que los niños hablen español en el recreo, sin castigarles o suspenderles por ello.
Tengan presente estas cosas cuando acudan a votar en Andalucía, en Valencia, en Aragón, en Extremadura, Castilla-La Mancha o en las generales, porque la tropelía se perpetra, como todas las demás, con el apoyo, la complicidad y la aquiescencia de Espadas, Puig, Lamban, Espadas, Vara, Page y demás caraduras socialistas.