La guerra en Ucrania ha transformado el mercado petrolero. Mientras que Europa sigue debatiendo un embargo completo al petróleo y al gas ruso, el mercado se mueve de forma inesperada.
Aunque Venezuela sigue produciendo petróleo, solo está comercializando en el mercado asiático debido a las sanciones. No obstante, ahora tendrá que competir contra el petróleo ruso, lo que pudiera repercutir en el precio, ya que se obligaría ofrecer mayores descuentos.