El dato es escalofriante.

La natividad es la base de la festividad cristiana de Navidad, aunque desde el Gobierno pretendan desprenderse del origen de la palabra. Nos encontramos con que la natividad está en vías de desaparición.

Cada vez nacen menos bebés y la fecundidad de las españolas es ya inferior a 1'2 hijos/mujer.

El periodista Álex Navajas, colaborador habitual de ‘La Segunda Dosis’, hace hincapié en estas cifras, “el fracaso llama al fracaso”, advierte.

“En una provincia tan despoblada, como Zamora, se producen cuatro muertes por cada nacimiento. Estamos hablando de que para apoyar la España vaciada tenemos que apoyar el emprendimiento y apoyar la banda ancha de Internet. Tenemos un serio problema de natalidad. Lo que ha convertido el feminismo a la mujer es en una especie de competidora del hombre, competir en el trabajo, en el prestigio laboral, en el prestigio profesional. Si ser madre es el equivalente a quedarte fuera de juego y a fracasar en la vida, habrá una mala relación con esta idea”.

Apenas quedan tres días para que acabe el año. Doce meses en los que la izquierda ha desplegado toda su artillería, intentado derribar a Isabel Díaz Ayuso, presidenta de la Comunidad de Madrid.

La popular denunciaba que había sufrido amenazas por denunciar la corrupción socialista.

“Es parte del discurso progre. Espero que los medios de comunicación nos convirtamos en los que persiguen y denuncian a aquellos que roban y que luego se fijen en el carné político. Hay gente que solo le importa el robo cuando lo han hecho sus enemigos políticos”.

Un claro ejemplo del control que ejerce sobre los medios de comunicación y la conciencia social que existe en cuanto a la corrupción. Los ERTE de Andalucía son silenciados y la Gürtel abre portadas de periódicos.

“Dentro de ese discurso de la izquierda, por supuesto, amplificarán los delitos de los otros y minimizarán los delitos de los suyos”.

¿Qué pasó con las balas que mandaron por correo a Pablo Iglesias?, ¿y el ataque a la sede de Podemos en Cartagena?

Aquello -recuerda Navajas- quedó en agua de borrajas, y al final, acabas pensando que es todo un montaje. No te queda otra.