Tijuana (México), 25 dic (EFE).- La Navidad es una fecha dolorosa para los miles de migrantes varados en la frontera mexicana con Estados Unidos que pasan las fiestas en albergues o, en su defecto, bajo el techo de una carpa de un campamento improvisado.
Entre las familias migrantes en la ciudad de Tijuana está Lizbeth, una joven originaria de Honduras que lleva tres meses en esta frontera, a la que llegó acompañada de sus dos hijas en búsqueda de una oportunidad de cruzar a Estados Unidos para huir de la violencia en su país.
Imágenes: Israel Aaron Martínez Páez
Edición y locución: Annia Hidalgo Vargas.