El enviado especial del Gobierno de Estados Unidos en Haití, Daniel Foote, renunció a su cargo como muestra de rechazo a las expulsiones a gran escala de migrantes haitianos a su tierra natal, que calificó de “inhumanas”. El funcionario había buscado cambios en la política hacia Haití, pero sus solicitudes no fueron recibidas por la Administración de Joe Biden, según dos funcionarios del Gobierno. teleSUR