"Hace hoy cinco meses que me vaciaron la casa. Estoy muy mal, cada día peor. No puedo ir allí... Me encuentro tanta cosa vacía... No están las cosas que necesitaba. No sabemos absolutamente nada, nadie nos ha dicho nada. Pido a los jueces que me digan algo, que hagan algo por mí. Así no se puede vivir". Rosario Bravo Marín, de 97 años, perdió casi todo durante el