La contaminación de los ecosistemas marinos es uno de los problemas más preocupantes de la actualidad, pero nadie parece prestar atención a lo que se supone la industria pesquera en este ámbito. Cada año se vierten en los mares alrededor de 11 millones de toneladas de plástico, de los cuales el 10% son residuos de la pesca.
Según un informe de la organización ambiental WWF, entre 500 mil y 1 millón de toneladas de artes de pesca afectan a los océanos cada año. Al año, se vierten al mar 6% de todas las redes de pesca usadas, el 8,6% de las trampas y nasas y el 29% de todas las líneas de pesca. A estos aparejos de pesca abandonados en los mares se les conoce como 'redes fantasmas', ya que continúan generando un impacto muy negativo en la fauna marina durante décadas, sin que nadie las procese.