Roma (Italia), 16 abr (EFE).- (Imagen: Álvaro Padilla) Unas 2.000 familias esperan a que los cuerpos de sus familiares fallecidos sean incinerados en Roma, una situación que movió hoy a una treintena trabajadores del sector funerario de la capital italiana a protestar por los retrasos "de 30 a 50 días" que se acumulan por una enrevesada y muy lenta burocracia.