La Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSIF) ha presentado este viernes un balance sobre las agresiones al personal sanitario y el impacto de la pandemia en los centros de atención primaria y urgencias hospitalarias de toda España. Según este, en 2020 se produjeron 962 casos de este tipo, un aumento del 32 por ciento respecto al año anterior. Por todo ello, reclaman un "aumento de las plantillas", con 289.000 trabajadores más para la Sanidad; eliminar la tasa de reposición, vigilantes de seguridad y cambios normativos que disuadan al ciudadano de agredir a sanitarios.