El sonido de los cuencos tibetanos acompañados de hermosos paisajes naturales ayudan a calmar la mente y eliminar la ansiedad. Los recipientes de metal tienen la función de emular los sonidos de la naturaleza para equilibrar los chakras hacia un estado de paz, relajación y serenidad. Alivian el estrés, calman la ansiedad, mejoran la capacidad de concentración, estimulan la actividad del cerebro, controlan el insomnio y combaten los dolores de cabeza.